La cebolla y el asma.
Los asmáticos deberían tomar cebolla cada día ya que sus efectos sobre esta enfermedad están muy bien documentados. Y es que la cebolla, gracias a su riqueza en Tiosulfinatos, alivia la constricción de los bronquios. Además es muy rica en Quercitina que también alivia las alergias (que son otro factor que complica el asma). Por si fuera poco, su gran poder bactericida ayudará a los asmáticos a hacer frente a las infecciones respiratorias que a menudo se les complican y terminan en una crisis asmática. |
Un consejo llevado a la práctica:
Un consejo tradicional muy eficaz es: cortar una cebolla grande por la mitad y dejarla en nuestra mesita de noche junto a nuestra cama cuando tenemos resfriados, dificultad en respirar o mucha tos. |
Un consejo de Auro. |